Aunque la Romería Vikinga estuvo presente estos dos últimos años de pandemia, fue en esta 62 edición cuando se recuperó la normalidad, superando todas las expectativas.
El alcalde, Alberto García, destaca que no se registró ninguna incidencia que pudiera alterar el desarrollo de las distintas actividades programadas y califica de rotundo éxito a organización y el público que se registró en estos días. En los conciertos del Vikinsons se congregaron unas 6000 personas cada día, y el Desembarco registró la mayor afluencia de público de la historia de la fiesta. En esta semana se estima que se acercaron a Catoira más de 130.000 personas.
El Gobierno local agradece la implicación de las distintas instituciones y entidades colaboradoras, así como del personal del Concello, de los voluntarios, de las/os vecinas/os de Catoira participantes, y de la ciudadanía en general, que supo disfrutar de esta magnífica fiesta con responsabilidad.
