Este otoño tenemos la oportunidad de disfrutar de nuevo de una exposición que mezcla el arte y la naturaleza a través de tres manifestaciones diferentes: los bonsáis, la cerámica y la pintura.
Tito Riveiro muestra parte de su colección de bonsáis en una de las etapas más recomendables para admirarlos. Consigue reducir la escala muchas variedades distintas de nuestra flora autóctona y otras alóctonas para disfrutarlas de una forma diferente a la que estamos habituados. Dada su fragilidad, los bonsáis estarán expuestos únicamente durante un fin de semana: entre los días 22 y 24 de octubre.
La manipulación de otro material natural, pero inerte, complementa esta muestra. Al igual que hicieron ya nuestros antepasados, Ana González, restauradora de bienes culturales, utiliza la arcilla como materia prima para sus creaciones. En esta ocasión, la réplica que realizó del mosaico romano de Panxón será el elemento central de una colección que trata de dar a conocer la riqueza cultural que nos rodea con el fin de contribuir a su puesta en valor y preservación.
La exposición se completa con la obra pictórica de Ángeles Garrido. Ha participado en numerosas muestras colectivas e individuales. En su obra procura la belleza con cada motivo elegido, caminando entre el realismo y el expresionismo. Representan desde paisajes que transmiten paz, retratos de personajes que nos envían un mensaje, a escenas ecuestres de gran fuerza.